lunes, 29 de agosto de 2011
AVIONES
¡Mira! ¡un avion…! ¿no te parece que vuela muy bajo? A mi, cuando los aviones vuelan tan bajo me da un poco de miedo. No porque piense que se vayan a caer (¡menuda tontería!), más bien porque siento que, el hecho de que vuelen tan bajo, puede ser el preludio de algo espantoso, una guerra o algo así… ¡mira! ¡y por ahí va otro igual de bajo! Te juro que se me ponen los pelos de punta…
Ya te estoy poniendo de los nervios otra vez ¿no? Como siempre que pasa algo, eludo el tema y para mi puede ser más importante que vuele un avión bajo antes que afrontar lo que está pasando entre nosotros… ¡Pero es que son dos aviones, no uno! Pero bueno, volvamos a la tierra, que los aviones, por muy bajo que vuelen, vuelan. “Pies en la tierra, pies en la tierra, pies en la tierra…” ¡joder! ¡es que no es tan fácil! ¿sabes? Despegamos en un avión sin cinturón de seguridad y ahora, que tenemos que afrontar un aterrizaje forzoso, lo busco y no lo encuentro…. ¡coño! ¡que esto parece un vuelo de Ryanair! Vale, perdona, ya dejo de decir tonterías… Sabes que es mi forma de evadirme.
¡Si! ¡evadirme! ¿acaso no puedo? Necesito evadirme un poco de esta situación que me está llevando a la locura, que no me deja vivir, que no me deja comer, que no me deja dormir, que me paraliza en todos los aspectos de mi vida y eso no me gusta, ¿sabes? porque demasiado difícil es tomar las riendas de la vida de uno para que ahora, así de repente, el caballo se te desboque. Y perdona si me paso la vida utilizando metáforas, pero es que uno así. Pero bueno, ya me centro y dejo de utilizarlas, en serio… Vamos al tema… ¡mira! Un tercer avión… y yo creo que este vuela más bajo todavía… ¿no se te ponen los pelos de punta?
Seamos claros: creo que hoy no es el día para tratar de afrontar todo esto. Tu piensas en tierra y yo solo puedo pensar en aire, en ese vuelo que tomamos un día y que nos llevó más alto de lo que yo nunca hubiera podido soñar… entonces era hermoso no llevar cinturón de seguridad ¿recuerdas que lo hablamos?. (pausa) Si te parece, lo dejamos para otro momento, para un día en el que yo me ponga esas botas que me anclan a la tierra, aunque me aprieten terriblemente y odie llevarlas porque se que, al quitármelas, voy a tener los pies llenos de rozaduras ¡joder! ¿es que nunca voy a aprender a hablar sin utilizar metáforas?
¡Mira! Otro avión volando bajo… Aquí se está liando una buena.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
hola, no consigo ver las demas entradas del blog, no veo ningun indice donde navegar por el blog
saludos
Hola. No se desde donde habrás accedido que te ha llevado a una única entrada. Prueba a poner directamente http://robertogarciaencinas.blogspot.com/ que te dará la opción de ver las antiguas entradas. Al menos, desde mi equipo, me deja hacerlo.
Si aún así no consigues ver otras entradas, por favor, no dudes en comunicármelo para ver si puedo arreglarlo.
Muchas gracias por tu interés
Roberto
Publicar un comentario